Carletti Porta y Curro Violero promueven una industria cultural más sostenible

Los cantautores cuantificarán la huella de carbono derivada de sus shows en un concierto especial el día 2 de diciembre en Ea! Teatro (Albacete)

A estas alturas, casi todos somos conscientes del impacto que cada una de nuestras acciones tiene en el medio ambiente, y del efecto negativo suponen a (cada vez menos) largo plazo. Y la industria cultural no es una excepción. En este sentido, los cantautores albaceteños Carletti Porta y Curro Violero se atreven a ir un paso más allá en su apuesta por la ecología y la sostenibilidad ambiental con un proyecto que se verá plasmado en forma de un show muy especial dentro de su gira «Mejor bien acompañado». Los cantautores albaceteños visitarán el próximo día 2 de diciembre el Ea! Teatro de Albacete en de un evento cultural con un objetivo muy especial: cuantificar la huella de carbono.

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Conscientes del impacto ambiental que generan con sus conciertos, ambos artistas han unido ilusiones y experiencia con Ideas Medioambientales, consultoría ambiental, para así juntos poner cada uno su granito de arena para conseguir una industria cultural más sostenible y respetuosa con el medio ambiente, lo que pasa por contabilizar la huella de carbono que causa cada evento, lo que puede tener un efecto doblemente positivo:

Por una parte, a corto plazo, hacer que todos los agentes (desde el promotor hasta el público) sean más conscientes del impacto que genera cada evento, lo que puede hacer que tomen decisiones más concienciadas en cuanto a transporte o consumo durante el concierto.

Por otro lado, más a largo plazo, cuantificar la huella de carbono que supone cada una de las partidas de un evento de estas características, servirá tanto para replantear facetas organizativas de posteriores conciertos como para subsanar el deterioro que haya causado el propio show.

Para que el objetivo se pueda lograr, Carletti y Curro han de contar con la complicidad del promotor, la banda, el gestor de la sala, el público asistente y expertos en sostenibilidad. Cada uno de estos agentes habrá de participar a un nivel diferente, de diversas maneras y en momento distintos del proceso.

Los resultados finales se conocerán un tiempo después del concierto, puesto que habrá que realizar un estudio pormenorizado de los datos recabados (impacto generados por desplazamiento de artistas y público, alojamiento, gestión de residuos, consumo energético…) para encontrar la manera idónea de compensar el impacto concreto y de esta manera reducir la huella al mínimo.

«El cálculo de la huella de carbono de un concierto acústico no solo es una herramienta de medición,sino también un catalizador para la acción y la mejora continua hacia prácticas más sostenibles en la industria de la acción cultural.»